Hace pocos días nos llegó la temporada estival y parece que ha venido con fuerza a la provincia de Málaga ya que, al igual que otros años anteriores, se espera un verano de altísimas temperaturas.
Con el verano, también llegan las “peleas” con familiares, vecinos y amigos sobre cuál ha sido y será el más caluroso de todos.
El período estival ha traído a la provincia sus efectos típicos: días con terral opresivo, el mar con una temperatura inferior a la habitual, noches con brisa fresca… ¿A qué se deben estas variaciones?
Málaga es una ciudad de costa, muy extendida por el litoral, dejando el estío cielos despejados en los que siempre está presente el viento. Si esos vientos son de poniente la temperatura sube, mientras baja si proceden de levante. La alternancia de los mismos da lugar a días de calor abrasador intercalados con jornadas de brisa más fresca.
Además, cuando el poniente procede del noroeste, lo que se conoce como terral, las temperaturas pueden llegar a superar los 40 grados.
¿Por qué a veces el agua del mar se encuentra a una temperatura inferior de lo habitual?
El porqué de introducirte en el mar y salir al instante congelado también tiene que ver con el viento. Cuando hay viento de poniente la temperatura del agua del mar desciende, ya que arrastra la temperatura superficial del agua que es más caliente hasta alta mar y provoca un efecto conocido como surgencias. Éstas se producen cuando el agua profunda y más fría aflora a la superficie, enfriando la temperatura del agua. A su vez, este fenómeno está relacionado con la proliferación de nieblas en el litoral.
Nieblas matutinas. ¿Por qué se produce este fenómeno?
La niebla es frecuente en la costa durante el verano, ya que están muy ligadas al mar. Se producen cuando el cielo está despejado y el suelo se encuentra frío, precisamente después de que haya viento de poniente.
Hay una brisa de aire que está en calma sobre una superficie fría y por la noche se forman las nieblas. De ahí que cuando los malagueños se despiertan se topan con una ciudad cubierta de niebla, pero más por la zona apegada a la costa. Asimismo, la alternancia de vientos de poniente-levante también influye puesto que cuantos más cambios se produzcan, más niebla aparece.
Teniendo en cuenta que la provincia suele estar en bastantes ocasiones en alerta amarilla y naranja por las altas temperaturas, nos parece totalmente normal que los ciudadanos se vean obligados a instalar en su vivienda aire acondicionado. A pesar de que ciertos días el viento de levante haga regresar al fresquito por las noches, no es lo suficiente para aguantar todo el verano sin aire acondicionado.
La mejor solución para no pasar calor en Málaga es instalar aire acondicionado, un servicio que presta de forma eficiente y rápida Climatización FRV, así que es mejor no darle más vueltas y dejar de sufrir con los calores tan típicos de esta época del año.
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Y ya sabe: si pasa calor… ¡échele la culpa al viento!
