Cada vez son más los días de calor que sufrimos, por lo que el aire acondicionado se ha convertido en un dispositivo indispensable en casa y en las empresas. Este uso intensivo hace que el consumo de aire acondicionado tenga, actualmente, un gran impacto en la factura de la luz, por lo que es recomendable optimizar su uso para lograr que la factura de la luz no se incremente de forma notable.
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Cuánto consume un sistema de aire acondicionado
Los equipos de aire acondicionado tienen un consumo energético que puede llegar a ser muy elevado, sobre todo, dependiendo del espacio a climatizar o del tipo y modelo de aire elegidos.
- Cuando se instala un sistema de aire central, el consumo suele oscilar entre los 3000 y 3500 vatios la hora.
- Para los básicos que se instalan en ventanas, el consumo medio suele estar en torno a los 900 y 1440 vatios hora.
- Por su parte, los equipos de aire acondicionado portátiles tienen un consumo de 2900 a 4100 vatios por hora.
Si tenemos en cuenta las frigorías (cantidad de energía necesaria para reducir la temperatura de un gramo de agua a 14,5 °C), el consumo del aire acondicionado es:
- 2200 frigorías. 1350 vatios por hora.
- 3500 frigorías. 2150 vatios por hora.
- 4500 frigorías. 2800 vatios por hora.
- 2200 frigorías con inverter. 877,5 vatios hora.
Consejos para tener un aire acondicionado óptimo
A continuación, ofrecemos una serie de recomendaciones interesantes para optimizar el aire acondicionado, garantizando que siempre funcione en las mejores condiciones, y que así no tenga un impacto negativo en la factura mensual de consumo eléctrico.
Adquirir dispositivos con eficiencia energética
En la actualidad, los fabricantes ofrecen modelos de sus equipos de aire acondicionado marcados con triple A, lo que indica que su nivel de eficiencia energética es óptimo. Estos equipos no solo disminuyen la factura mensual de la luz, sino que ayudan a la sostenibilidad y cuidado del medioambiente.
Seleccionar el equipo ideal según el espacio
Realizar un estudio previo sobre el espacio o estancia donde el aire acondicionado va a funcionar es clave para poder elegir el modelo que mayor eficiencia ofrezca, es decir, que con un menor consumo, consiga mantener la temperatura deseada.
Realizar una instalación óptima
La instalación del aire acondicionado es fundamental a la hora de sacarle el máximo partido. Con una buena instalación, se podrán minimizar los posibles problemas de estos aparatos (falta de ventilación, altas temperaturas, exceso de suciedad…) y facilitar las tareas de limpieza y mantenimiento.
Si se realiza una instalación profesional de un sistema de aire acondicionado, se tendrá las garantías de que su consumo energético sea el indicado por el fabricante.
Contratar un buen servicio de mantenimiento
Apoyarse en profesionales cualificados y con años de experiencia montando, manteniendo y reparando sistemas de aire acondicionado, como los que tenemos en nuestro equipo, es la mejor alternativa para optimizar su consumo, garantizar su buen funcionamiento y prolongar su tiempo de vida útil.
Conseguir un bajo consumo del aire acondicionado es más sencillo con este asesoramiento profesional, pues se recibe un proyecto personalizado y los mejores consejos obtenidos en muchos años de experiencia, como por ejemplo:
- Cambiar los filtros, al menos, cada seis meses.
- Realizar una limpieza de los conductos y zonas principales de los equipos.
- Mediar los niveles de gas para detectar y reparar posibles pérdidas.
Sellar térmicamente las estancias
Si las zonas a enfriar por el aire se encuentran bien selladas térmicamente, se consigue que la temperatura se mantenga estable, mientras el equipo de aire trabaja menos tiempo y sin realizar grandes esfuerzos.
El aislamiento de la vivienda u oficina juega un papel crucial para lograr que el consumo medio de aire acondicionado descienda de forma notable.
Apostar por colores claros en paredes y techos
Saber cuánto consume un aire acondicionado es fundamental para tomar mejores decisiones que permitan un mejor funcionamiento que reduzca el importe de la factura energética. Una alternativa muy interesante para reducir el consumo es pintar paredes y techos con colores claros, pues reflejan la radiación solar y evitan el calentamiento de espacios interiores.
Hemos visto cuánta luz gasta un aire acondicionado y distintas formas de evitar que la factura de la luz se dispare por su culpa. Para reducir el consumo del aire acondicionado, es importante contar con el apoyo de profesionales del sector, que puedan ayudar con sus conocimientos y experiencia a tomar las mejores decisiones.
